Sabe de historia y poesía : Un hombre con letra, palabra, obra y sustancia

Cuando hablamos de sensibilidad podemos encontrar varias definiciones, pero describirla con palabras es un poco más complicado. Por ejemplo, escribir un poema que defina lo que eres y lo que tienes, para algunas personas puede ser una tarea complicada pero para Rafael Rattia, historiador egresado de los Andes, es tan fácil como cazar mariposas en un jardín secreto. Éste en la actualidad se dedica a escribir poesía y ensayos críticos de imaginación

Nunca lo he visto, pero por su voz y trato, sé que es una de las personas más maravillosas del mundo por la forma en la que percibo el estímulo de su voz y pensamiento. Es algo extraño, pero así me pasa. Cuando se me comentó la pauta para literatura pensé en él. El clima de la ciudad urbe caraqueña es un desastre, pero cuando tomé el teléfono todo cambió, creo que salió el sol y mi móvil comenzó a recibir mensajes de mi jefe para solicitarme esta pauta. No dudé entonces en llamarle y pedirle una entrevista; no se me negó y como siempre, muy amablemente, comenzamos a conversar sobre el clima y la situación actual de nuestras vidas.

Me contó que opinión que la escritura elige al poeta, al escritor. “Es un mito, una leyenda decimonónica la idea del escritor que «decide» una linda mañana de primavera convertirse en escritor. O que por obra y gracia de un mandato demiúrgico un escritor o escritora, de manera súbita e intempestiva, decida convertirse en escritor”

Rattia agregó: “A decir verdad, todo escritor se reconoce como tal a la postre, de tanto leer el escritor termina desembocando en un inexorable proceso de creación verbal-escritural queriéndolo o no, se reconoce en el especular reflejo de sus mundos alternos, sus particulares universos paralelos de índole estético-literarios”.

Rafael Rattia, mi querido amigo, historiador y poeta nato se descrbió así mismo con una frase de Emile Michel Ciaron, como “un historiador aquejado de intemporalidad”. Siente que la historia no merece atención más que como una carnicería en marcha del espíritu. Quisiera ser como Dios o el Diablo, con potentes y omnímodos poderes sólo para registrar el Mal en todos sus imperceptibles pormenores desde que el primer pitecántropus se puso a reflexionar en el umbral de una caverna hasta nuestro fachendoso y detestable homo politicus que pretende la edificación del reino del «bien» aquí abajo en la tierra. Por lo demás, la poesía y la historia siempre se han amonedado intrínsecamente en una especie de inextricable dialéctica en la que ésta última ha resultado llevándose la peor parte del devenir humano.

Este poeta entiende que la historia es el estudio de los hechos humanos a través del tiempo. La poesía, en cambio, es la ciencia substrayéndole la prueba empírica. ¿La ciencia del espíritu y de las almas sensible acaso?

 

Influencia literaria

 

Para ser un hombre de historia, es un gran personaje con un léxico inpredescible y grandes pensamientos. Así lo demostró al explicar que la influencia que a tenido a la hora de escribir le ha venido del devenir humano y de las circunstancias de la vida. Asimismo dijo: “Como todo ser humano, vivo inmerso ineludiblemente en un paradigma civilizatorio que incide y condiciona, directa o indirectamente, mi proceso creador. No puedo deshacerme de las determinaciones subjetivas que recibe mi sensibilidad desde cualquier exterioridad objetivamente social. Por lo general encaro lo realmente existente y lo transformo mediante la letra y la recreación de la realidad dada para intentar transmutarla al menos para mis particulares registros de percepción intelectiva y sensorial”

 

Para Rattia, quien en su amplía gama retórica se ha desempeñado como historiador. Durante tantos años, señaló que su influencia es recíproca, puesto que se siente influido por el espíritu de su época. “Si algún sentido posee la escritura es el de significar una voz clamando en el desierto, una voz que patentice un sentimiento y una aspiración de verdad que deje constancia de nuestro efímero paso por este lamentable, triste y desolador planeta en vías de extinción” explicó muy poéticamente.

 

Rattia me informó sobre sus proyectos y complementó la información indicándome que en Febrero de 2008 la Editorial estadounidense Obsidiana Press publicó su último libro de ensayo filosófico que actualmente está a la venta en internet visitando la dirección www.oplibros.com y que lamentablemente en Venezuela es un escritor proscripto y prohibido desde 1998. Sin embargo mi estimado amigo con un aire esperanzador y mucha fuerza me dijo para concluir:

 

“Hay que escribir sin sucumbir a la ilusión de la fatamorgana que representa el espejismo de las falsas expectativas. Escribir, escribir, que otros espíritus más evolucionados que nosotros se encarguen de lo demás. De cualquier modo, si tu Obra es imperecedera y eterna ya los siglos por venir se encargarán de ello”